Al menos 127 personas perdieron la vida y más de 700 resultaron heridas, tras un terremoto ocurrido el lunes último en el noroeste de China, informaron medios estatales.
El fuerte movimiento sacudió la provincia de Gansu, alrededor de la medianoche, dañando edificios allí y en la vecina provincia de Qinghai.
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Asimismo, se comunicó que más de 5 mil edificaciones resultaron afectadas.
Las autoridades chinas precisaron que el terremoto tuvo una magnitud de 6,2. Horas más tardes, un segundo seísmo sacudió la vecina Xinjiang.
Por todo ello, el presidente del país asiático, Xi Jinping, ordenó una gran operación de rescate.