En una audiencia pública, desarrollada en la sede de la Junta Nacional de Justicia (JNJ), la suspendida fiscal de la Nación, Patricia Benavides, hizo uso de la palabra para defenderse de las imputaciones en su contra.
Desde un primer momento, Benavides Vargas rechazó "tajantemente" que se busque "manchar" su carrera como fiscal.
"Estoy aquí con respeto, pero sin miedo, porque no me corro. No me corrí cuando, por el golpe de Estado, quisieron apresarme. Tampoco cuando tenía que cumplir mi función de fiscal y mis hijos me esperaban en casa todas las noches (…) Que ahora se intente manchar mi carrera fiscal, no lo acepto y lo rechazo tajantamente", enfatizó este jueves, durante una sesión en la que se evalúo su apelación contra la medida de cese provisional.
Enseguida, negó ante las cámaras que algún magistrado del cuestionado pleno de la JNJ haya recibido un "beneficio" por nombrarla.
"Me sometí a un concurso público, así como ahora me someto a sus competencias discipinarias. Pero eso sí, sin dejar de alzar mi voz por el respeto a mi derecho de defensa, así como al debido proceso que siempre he señalado a lo largo de mi carrera", comentó.
Tras estas palabras, la inhabilitada titular del Ministerio Público insistió en que no es cabecilla de una organización criminal, tal como se advierte en la tesis fiscal.
"Desde ya, reitero que no soy líder de ninguna organizacion criminal ni ha existido una organización criminal en la Fiscalía de la Nación", remarcó.
A fin de sustentar su postura, Benavides Vargas mencionó que la versión que la sindica como jefa de una red criminal carece de pruebas.
"No hay una sola evidencia que sea suficiente para decir que Patricia Benavides haya liderado una organización criminal. Solo hay dichos y simples pantallazos evidentemente manipulados. Rechazo todas las imputaciones en mi contra y reitero que no hay ningun elemento que respalde esas imputaciones", dijo.