Rolando Casivilca, de 65 años, es dueño de una bodega y agente bancario. De pronto, un hombre y una mujer ingresan a su local y le preguntaron por los precios de diversos productos, con el objetivo de distraerlo para robarle dinero.
En un inicio, todo hizo pensar que los ladrones iban a lograr su objetivo, pues el ladrón logró extraer el POS. Luego el sujeto lo apunta con un arma de fuego, exigiéndole que le entregue mil soles.
Sin embargo, los malhechores no contaron con la astucia de don Rolando, quien se escondió debajo del mostrador y tocó la sirena antirrobos, que hizo que los ladrones abandonaran su local de inmediato.
"No iban a robar, pero ellos tenían arma y querían atacarme. Toqué la sirena y por eso se corrieron", declaró en exclusiva la víctima a 'Willax Noticias'.
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