En Argentina, los ciudadanos de Fomosa se encuentran consternados por el atroz crimen que cometió un sujeto, identificado como Ariel Lovey, contra su pequeño hijo de 8 años de edad, quien padecía una discapacidad motriz en las extremidades inferiores por haber nacido prematuro.
De acuerdo con medios locales, los hechos ocurrieron el pasado miércoles, 27 de marzo, en el barrio San Roque, en la ciudad Ibarreta.
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Según la investigación, el hombre asesinó al menor con un arma blanca, para luego suicidarse, disparándose en el rostro con una escopeta. Sin embargo, no logró terminar con su vida inmediatamente, dado que fue hallado por un efectivo policial agonizando en el interior de un vehículo.
Al detectarse signos vitales, Lovey fue trasladado de urgencia hacia el Hospital Central, donde fue declarado muerto horas más tarde.
LA ESPELUZNANTE JUSTIFICACIÓN DEL FILICIDA
En un video, el filicida anunció su condenable y drástica decisión. En este material, el homicida alegó que su hijo nunca podría ser un niño normal por su discapacidad motriz.
"Haré un video despidiéndome. Creo que esta es la mejor alternativa, porque, si no, mucho sufrimiento. Tantos años. Zamir nunca logrará ser alguien normal", deslizó Lovey.
"Esto ya lo verán cuando nosotros no estemos más. Pido un millón de disculpas a todos los que les hice daño. No fue mi intención, pero bueno. Era joven. Soy joven todavía, pero ya no existiré más. Yo no quiero que nadie me llore, ni que nadie me lamente, ni nada; solamente que se me entierre y nada más. Bajo tierra, si es posible. Quiero que se olviden de mí", culminó.