Nicanor Boluarte afronta acusaciones que lo podrían llevar a ser encarcelado por más de 30 años. Estas guardan relación a su presunta participación en influencias ilícitas en lo que respecta a la designación de prefectos y subprefectos en diversas regiones del país.

Según las investigaciones, el hermano de la mandataria tenía como objetivo la recolección de firmas para la ficha de inscripción de su partido Ciudadanos por el Perú.

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Asimismo, se adjudica a Boluarte el cobro de sumas económicas a los funcionarios públicos que fueron colocados gracias a su influencia, los cuales fueron dirigidos a la agrupación CPP.

Por otro lado, se le imputa la injerencia que tuvo en el nombramiento de Juan José Enciso Torres como nuevo director ejecutivo de  Provías Descentralizado a través de Víctor Hugo Torres Merino.

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Cabe destacar que Torres Merino fue proveedor del programa Qali Warma por un total de S/12,000.