Las revelaciones que el futbolista Luis Suárez hizo del técnico Marcelo Bielsa han generado mucha controversia, poniendo en el ojo público a la selección de Uruguay, que está próxima a disputar la fecha doble de las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial 2026, ante Perú y Ecuador.
Una polémica que ha traspasado las fronteras del país uruguayo, debido a que el exarquero José Luis Chilavert también alzó la voz para respaldar lo dicho por el 'Pistolero', arremetiendo contra el DT del combinado 'Charrúa', quien dirigió al exguardameta de la selección paraguaya en el Club Vélez Sarsfield, en las temporadas 1997 y 1998.
“Generalmente, cuando no salen los resultados, utiliza palabras muy ofensivas. Por eso me peleé con él. A un compañero lo trató de cobarde. Yo le dije: ‘Acá no hay ningún cobarde. Este plantel ganó todo y usted no ha ganado nada’. Ahí empezó el lío y en ese momento me separó”, declaró Chilavert a 'Radio Ñanduti'.
Además, agregó: “Cuando perdió todos los partidos en la pretemporada, tuvo que recurrir a mí, pero en ese momento ya no hablábamos. Me sacó la capitanía en Vélez y me prohibió patear tiros libres. En un partido contra Gimnasia de Jujuy salí igual a patear un tiro libre, convertí un gol y mis compañeros no me querían abrazar, miraban al técnico”.
Por último, el excapitán del combinado 'guaraní' remarcó: “Bielsa se cree más importante que los jugadores, esa es la realidad. Le molesta los líderes mayores a él, por eso los liquida y los maltrata. Él no puede convivir con las figuras. La figura tiene que ser él. Siempre dirige clubes de mediana categoría porque a los chicos los puede maltratar, pero a los más experimentados, imposible”.
Como se recuerda, el delantero del Inter Miami reveló que Bielsa no solo es alejado de los futbolistas, sino que también es mal educado por ni los saluda: "Bielsa ha separado a todo el grupo hasta de la forma que tiene de entrenar. (…) Muchos jugadores hicieron una reunión para pedirle al entrenador que por lo menos nos dijera buen día, ni saludaba".
Suárez también sostuvo: "A los empleados no los dejan pasar, saludar y comer con nosotros. Se tienen que cuidar hasta de la puerta por donde tienen que entrar. Me parte el alma que en el Complejo se viva así hoy día".