A pesar de que todavía no hay resultados oficiales sobre las elecciones presidenciales que este domingo 28 de julio se han llevado a cabo en Venezuela, muchas personas ya festejan una posible derrota del dictador Nicolás Maduro ante su contrincante Edmundo González.
En las afueras de la Embajada de Venezuela en nuestro país, cientos de ciudadanos, que llegaron a la capital, huyendo del régimen de Maduro, están festejando porque están convencidos de que esta vez, la corrupción y patrañas de actual mandatario no triunfará ante el pedido del pueblo de ser libres.
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"Libertad, libertad", gritaban los venezolanos agitando su bandera, soñando que el calvario que han vivido por años está cerca de acabar. Sin embargo, en medio de esta gran alegría, hay una conmovedora historia que refleja las duras consecuencias que ha generado la maldad de Nicolás Maduro en sus compatriotas.
"Llegué en enero del 2018 a la ciudad de Lima. Estando aquí, lamentablemente murieron tres familiares: mi papá, mi hermana, después mi mamá y no pude estar con ellos. El narco régimen tiene destrozado al país", fue la conmovedora historia que narró Carolina Mendoza a 'ContraCorriente'.
