Este martes, el Congreso de la República decidió suspender, por 120 días, la congresista María Cordero Jon Tay, quien fue expulsada de la bancada de Fuerza Popular, tras ser acusada de recortar sueldos de los trabajadores de su despacho.
Con 90 votos en favor, 1 en contra y 12 abstenciones, el pleno aprobó el informe final del expediente N.° 122 de la Comisión de Ética, que recomienda la suspensión en el ejercicio del cargo y el descuento de sus haberes de Cordero Jon Tay.
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Ella es acusada de vulnerar los artículos 2 y 4 del Código de Ética, y los artículos 3, 4, 6 y 8 del Reglamento del Código de Ética, luego de ser denunciada por exigir en su favor hasta el 75 % de la remuneración de un trabajador, asignado en la Comisión Especial del Proyecto Especial Binacional Puyango Tumbes.
La parlamentaria no formó parte de la sesión del pleno para defenderse y, en su lugar, presentó una licencia de salud para que su caso pueda discutirse en una próxima sesión.
Cordero alegó que se encuentra internada en la clínica Jesús del Norte, puesto que tiene una "artrosis lumbar".
Al respecto, el titular del Poder Legislativo, Alejandro Soto, optó por continuar con la sesión, ya que esta legisladora había sido citada en más de una oportunidad para su participación en el debate del informe en su contra, en dicho grupo de trabajo.
