Entre enero y agosto de 2024, se han registrado 14,220 denuncias de extorsión, lo que quiere decir que cada 24 minutos se registra una nueva víctima en Perú.
Estos datos, expuestos por el dominical 'ContraCorriente', provienen de la misma Policía Nacional (PNP), compilados por Transparencia. Esa estadística demuestra que los criminales no se intimidan ni con el estado de emergencia, dictado hoy en día en varios distritos de Lima y Callao.
Últimamente, la ola de criminalidad se ha desbordado, de tal forma que no existe ningún rincón de la ciudad donde los peruanos puedan sentirse seguros.
A sabiendas del sentir diario de todos los trabajadores, la presidenta de la República, Dina Boluarte, estaría viviendo en una realidad paralela, bastante ajena al que atraviesa un ciudadano de pie.
Las bandas del crimen organizado continúan respirándonos en la cabeza. Desde que se inició el estado de emergencia, se ha reportado nueve muertos, entre ellos dos menores.
Van diez días en los que 14 distritos limeños viven bajo estado de emergencia. A pesar de la medida impuesta, la criminalidad no se detiene, dado que siguen los robos, extorsiones y cobro de cupos.
'ContraCorriente' recorre los distritos más peligrosos en estado de emergencia, una disposición que no frena aún el incremento de las cifras de víctimas del hampa.
