Holanda suspendió este domingo el uso de la vacuna de AstraZeneca contra la COVID-19, hasta el 28 de marzo, después de que se reportaran posibles “efectos secundarios” en Dinamarca y Noruega.
“Basándose en nuevas informaciones, la Autoridad holandesa de Medicamentos aconsejó, como medida de precaución y a la espera de una investigación más profunda, suspender la administración de la vacuna de AstraZeneca”, comunicó el Ministerio de Salud.
Las autoridades sanitarias irlandesas también recomendaron suspender por “precaución” el uso de la vacuna AstraZeneca contra el coronavirus, tras la aparición de coágulos sanguíneos en Noruega.
Ello se produce luego de que la agencia noruega de productos de salud informara “cuatro nuevos casos de coágulos sanguíneos en adultos” tras haber recibido la vacuna.
AstraZeneca aseguró el último viernes que su vacuna no genera “ningún riesgo agravado” de coágulos sanguíneos. Asimismo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó también que “no hay razón para no utilizar” esta vacuna.
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