El congresista castillista Pasión Dávila, de la bancada Bloque Magisterial, justificó el golpe cobarde que le propinó por la espalda al legislador no agrupado Juan Burgos, durante una reciente sesión del Pleno del Parlamento.
Para disculpar su accionar violento, Dávila manifestó a la prensa que él ha sufrido "maltrato psicológico y verbal".
“Ese golpe puede ser mal ejemplo, está bien, y el maltrato psicológico y verbal que recibí no contamos, no saben desde cuándo me maltratan. No pueden abusar del rostro que tengo, de mi humildad. Me mentaron la madre, me llamaron terrorista, del Movadef (brazo político de la agrupación terrorista Sendero Luminoso), ¿eso soy yo?”, expresó el izquierdista en conferencia de prensa.
Asimismo, calificó la agresión a su colega como "una acción de rebeldía", a la vez que pidió perdón a su "pueblo".
“Pido perdón a todo mi pueblo, pero fue una acción de rebeldía. (…) Están queriendo sacarme, no quieren verme. Que me saquen si quieren, que me destituyan, no tengo inconveniente”, refirió.
Por este ataque, la Mesa Directiva del Parlamento ha planteado suspender por 120 días a Pasión Dávila.