El excapitán de la selección inglesa, David Beckham, hizo más de 12 horas de cola para darle el último adiós a la reina Isabel II en la capilla ardiente en Londres.
Al momento de llegar al ataúd de la exmonarca, el exfutbolista del Real Madrid y Manchester City no pudo contener las lágrimas al momento de mostrar sus respetos a quien en vida fuera la gobernante de Reino Unido por 70 años.
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“Es muy emotivo, y el silencio y la atmósfera en la sala son muy difíciles de explicar, pero todos estamos aquí para dar las gracias a su majestad por ser tan amable, cariñosa y reconfortante a lo largo de los años”, dijo Beckham a un grupo de periodistas, entre ellos la AFP.
“Era nuestra reina y el legado que deja es increíble”, añadió a la salida de Westminster Hall.
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Beckham, de 47 años, fue descubierto por la prensa mientras esperaba en la fila, vestido con traje, corbata y abrigo, todo de negro. Además, llevaba una gorra y un paraguas del mismo color.
“Pensé que viniendo a las dos de la madrugada iba estar un poco más tranquilo, me equivoqué”, señaló Beckham al medio ITV News.
El exmodelo también utilizó su cuenta de Instagram para señalar lo siguiente: ““Siete años de mi carrera los disputé en la Premier League, siendo esta mi octava temporada viviendo en Inglaterra. A lo largo de estos años, he sentido el amor eterno del Reino Unido por su reina y lo importante que fue y será para siempre Su Majestad para el pueblo británico”.
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