Carlos Chandía, árbitro chileno, decidió romper su silencio para hacer un polémica revelación que viene provocando un escándalo en el balompié mundial, colocando en el ojo del huracán al combinado patrio de Argentina, encabezada hoy en día por el astro Lionel Messi.
De acuerdo con el colegiado, suscitó un controvertido hecho en la semifinal de la Copa América 2007, instancia en la que midieron fuerzas Argentina y México.
En la contundente victoria por 3-0 en favor de los 'albicelestes', Chandía confesó haber ayudado al exdelantero del FC Barcelona.
En dicho cotejo, el árbitro evitó la expulsión del actual jugador del Inter de Miami, aún cuando cometió una infracción que debió haberle costado una segunda tarjeta amarilla y, por ende, la expulsión. En pleno juego, el juez le propuso no mostrarle la cartulina, solo si recibía de él una camiseta suya.
"Messi de la nada levanta una pelota y la corta con la mano, pero en la mitad de la cancha. Ninguna posibilidad de gol del equipo mexicano ni nada por el estilo", contó para ESPN.
La propuesta, que finalmente aceptó Messi, fue para que tenga la opción de disputar el último compromiso de la Copa América 2007.
"'Esta jugada es amarilla, pero te va a costar la remera (camiseta)'. Y no le mostré la amarilla. Quedaban dos minutos y medio", comentó Chandía.
"La camiseta me la fue a dejar al camarín después. Incluso, se la quería sacar en la cancha y le dije: 'No, no, no; llévamela al camarín'. Y llegó con la camiseta al camarín. Me la fue a dejar allá", concluyó.