La espera terminó. Finalmente, Paolo Guerrero aceptó ser jugador de la Universidad César Vallejo, luego de una negociación que duró dos días y en las próximas horas viajará a la ciudad de Trujillo (La Libertad) para ser presentado como nuevo jugador.
Este miércoles se realizaron hasta dos reuniones: la primera se llevó a cabo en la casa de la madre de Paolo, Petronila Gonzales, donde asistieron el presidente de la UCV, Richard Acuña, el capitán de la selección peruana y el abogado de este último, Julio García; mientras que el segundo encuentro fue en el domicilio de Acuña.
A esta reunión, Guerrero llegó junto a su madre, Doña Peta, su novia, Ana Paula Consorte, y su hermano Julio 'Coyote' Rivera, quien manejaba una camioneta tipo van, y García. Junto a Acuña, estuvo su esposa, Brunella Horna, su madre, Carmen Rosa Núñez, y el abogado del club trujillano. En esta reunión se llegó a una decisión favorable para ambas partes.
Se supo que la presencia de miembros de la familia del 'Depredador' fue porque este pidió protección para ellos. La condición que puso Paolo Guerrero para cambiar su postura y honrar el contrato que firmó con la Vallejo fue seguridad para sus familiares, luego de las amenazas que recibió Doña Peta. Es así que Richard Acuña dio su palabra al delantero, con lo que el tema quedó zanjado tras varios días de incertidumbre.
Ahora que acabó la novela, Guerrero estará viajando en las próximas horas a la ciudad de Trujillo para ser presentado como refuerzo del equipo poeta.