Unas 1,400 personas han perdido la vida, al momento, en Israel, luego de los brutales ataques del grupo terrorista Hamás, registrados desde el último sábado. Además, según información de CNN, el número de heridos ha superado los 2,600.
Se trata de la peor masacre de la historia del país hebreo, que, de manera extraña, no advirtió la avanzada de la agrupación islamista palestino desde la Franja de Gaza por aire, mar y tierra.
Kobi Michael, investigador del centro de reflexión INSS de Tel Aviv, dijo a la agencia AFP que el ataque tomó por sorpresa a Israel, que cuenta con uno de los mejores servicios de inteligencia del mundo: Mossad.
"Es un gran fracaso para Israel y un gran éxito para Hamás… No estábamos preparados", dijo Michael.
Agregó que, para llevar a cabo un ataque como el registro, "se necesita mucha preparación, planificación, coordinación, y contar con perspectivas y objetivos importantes".
AYUDA EXTERNA
El diario estadounidense The Wall Street Journal aseguró que Irán ayudó a preparar la sangrienta incursión de Hamás.
Según dicho medio, desde agosto, miembros de la Guardia Revolucionaria de Irán ayudaron a planificar el ataque e, incluso, habrían dado luz verde para su inicio.
Sin embargo, el Gobierno de Estados Unidos aún no confirma que hay pruebas de la implicación iraní en el atentado.
"Aún no hemos visto pruebas de que Irán haya dirigido o esté detrás de este ataque en particular", manifestó el domingo en una entrevista con CNN el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken.
En tanto, el Gobierno de Irán señaló que apoya la “legítima defensa de la nación palestina”, pero rechazó las acusaciones acerca de su eventual papel en la avanzada.